JORNADAS DEL MUSEO DE MOLINA 2015

Las Jornadas del Museo de Molina de Aragón se concibieron como un medio para acercar los miembros de nuestra Asociación al Museo al que estamos vinculados. Es una oportunidad para conocer y disfrutar del Museo, conocer los logros alcanzados en el último año y los proyectos de futuro que va a afrontar.

Junto con estas actividades se programaron salidas para visitar algún punto geológico peculiar y observar lugares de interés en el Parque Natural del Alto Tajo.

Ya en el primer número de nuestra revista, hablamos de los Museos de Molina de Aragón. Su director, Manuel Monasterio, nos comentaba cómo se había creado y cuales eran su objetivos: la divulgación de nuestro Patrimonio Cultural y Natural y ser un referente de la riqueza de la comarca de Molina de Aragón.

  

Es un museo de propiedad Municipal y gestionado por la Asociación de Amigos del Museo de Molina. Está ubicado en el antiguo Convento de San Francisco que fue remodelado convenientemente para acoger las colecciones que alberga.

Como le gusta comentar a su director: - “es un Museo de la Vida”, con el que a través de la paleontología, entomología y arqueología se presenta cómo la vida se ha desarrollado y el hombre ha llegado a dominar su entorno y a crear la cultura”-.

Para cumplir estos cometidos, el Museo de Molina se ha dividido en cuatro secciones:

  • Arqueología. El museo cuenta con una importante colección de objetos de la vida cotidiana de pueblos que habitaron la comarca, desde el Paleolítico a la Edad del bronce. Los más valiosos son los objetos que de la cultura Celtibérica posee.
  • Entomología. Hay una amplia exposición dedicada al mundo de los insectos, donde se muestra su diversidad, expuesta en bellos ejemplares perfectamente conservados.
  • Vida Natural. El Museo mantiene unas relaciones muy estrechas con el Parque Natural del Alto Tajo. El parque sobresale por la sucesión de cañones fluviales horadados por un río Tajo joven y sus afluentes. Poseen un saludable estado de conservación siendo el hábitat de una multitud de comunidades animales. Cuando fallece algún animal como consecuencia de un accidente (atropellos, choques con tendidos eléctricos,…) y es recogido a tiempo por los agentes del parque, lo llevan al Museo donde es naturalizado (disecado) y expuesto en la sala de Vida Natural para el conocimiento y disfrute de los visitantes.
  • Paleontología. Alrededor del antiguo claustro del convento se exponen los paneles explicativos y las vitrinas con los fósiles y réplicas. Están organizadas de modo que abarcan desde los seres más antiguos hasta los más modernos. La mayoría de estos fósiles son extranjeros pues la legislación vigente en nuestro país es muy restrictiva en el tema de las colecciones privadas de fósiles.

Este es precisamente uno de los objetivos del Museo desde el momento de su creación en el año 2002. Aspira a conseguir el permiso oficial para exponer los fósiles de la comarca. Los alrededores de Molina de Aragón y Guadalajara en general tienen importantes testimonios de la vida que existió en épocas pasadas y el Museo desea convertirse en un punto de referencia para la divulgación de este patrimonio.

El 25 de Abril se celebraron las jornadas  organizadas por el museo de Molina a las que como es habitual asistimos.

A primera hora quedamos en Molina y de allí salimos a visitar La cueva de los Casares. Es una cueva que contiene importantes grabados y pinturas prehistóricas que han sido fechadas del Paleolítico medio (25.000 años a.C.) y que están declarados como Bienes de Interés Cultural Patrimonio histórico de España. También han sido hallados restos arqueológicos atribuidos al hombre de neandertal. Se encuentra situada en el término municipal de Riba de Saélices (Guadalajara), en un promontorio a orillas del río Linares.
Su importancia es debida a los aproximadamente 200 grabados que posee que representan animales de la época y escenas cotidianas de la comunidad que la habitaban.


Dibujo de unos de los grabados que pudieron contemplarse en el interior de la cueva. Se trata de la representación de dos animales superpuestos; un caballo y un ciervo.
Al ser el acceso para grupos reducidos, tuvimos que dividirnos en dos grupos y mientras que un grupo veía la cueva el otro se acercó a ver una zona que suele tener Aragonitos y así hacer tiempo.

Después  de ver la cueva fuimos a El Ceremeño, poblado celtíbero fortificado que está situado en lo alto de un promontorio, cerca del la localidad de Herrería en la provincia de Guadalajara. El poblado fue construído en alto para gozar de una buena posición estratégica y está fortificado para favorecer la defensa. A su alrededor se extiende la vega del río Sauco afluente del río Gallo, que son tierras fértiles que eran cultivadas por sus ocupantes.
El recinto constaba de una muralla de piedra de la que quedan un par de lados flancos completos y los cimientos de otro. En su interior es posible conocer la disposición de las calles y viviendas gracias a las excavaciones arqueológicas que se han realizado.

Tras esta visita regresamos a Molina donde comimos.
Más tarde, en el Museo, Manuel Monasterio nos dio una breve charla en el patio y pudimos ver las últimas exposiciones tanto de paleontología como de fauna autóctona.
De camino a casa pudimos parar a observar la geología del jurásico medio para rematar una agradable jornada plena de actividades muy interesantes.